viernes, 19 de diciembre de 2014

Historia del Vino en Chile

En el siglo XVI los españoles conquistaron nuestro país y cultivaron la uva. Hoy, los vinos de Chile ya conquistaron el mundo con los más altos estándares de calidad.

En el 1524 los conquistadores españoles, quienes al evangelizar necesitaban del vino para celebrar la Eucaristía, comenzaron a probar el cultivo de la vid por primera vez en México, bajo las instrucciones de Hernán Cortés. Años más tarde se logró la primera producción exitosa de vinos americanos provenientes de las tierras altas de México y ya a mediados del siglo XVI, esta práctica viajó con los conquistadores hasta llegar a Perú, Chile y Argentina.

Según los documentos de la época, el responsable de insertar la primera cepa País (Negra) en Chile fue el sacerdote jesuitaFrancisco de Carabantes. Gracias al privilegiado clima mediterráneo de la zona central de Chile (inviernos lluviosos y calurosos veranos), esta variedad se adaptó rápidamente al suelo y fue la responsable durante cerca de 300 años de la producción de casi todo el vino chileno. También se conocieron otros parrones de Moscatel, Torontel, Albillo y la de Mollar, según señalan algunos textos del jesuita Alonso de Ovalle. Todas ellas habrían sido compradas por el Cabildo de Santiago para hacer el vino de las misas.

Desde los alrededores de Santiago, fueron extendiéndose las plantaciones a nuevos territorios colonizados, conociéndose cultivos ya en el 1548 en el Valle del Bío-Bío, al sur de Chile. A diferencia de la actualidad, en esa época el vino de mejor reputación no provenía de la zona central, sino de Concepción. Así lo atestiguaba el francés Freizer y los españoles Juan y Ulloa. Más tarde, durante la Guerra de Arauco fueron destruidos muchos viñedos, por lo cual se decidió comenzar con las plantaciones más al norte de Santiago.

A pesar de su antigüedad, el vino no fue siempre la bebida alcohólica de principal consumo entre los chilenos, pues era preferente sólo de los blancos. En cambio, los mestizos que eran la mayor población de la época, siguieron consumiendo chicha y la mistela, lo cual devela una continuidad en los hábitos de los indígenas, quienes ya antes de la conquista tomaban chicha en base a maíz u otros frutos. Ésta tampoco fue desechada por los de estratos más altos, pues en las reuniones sociales frecuentemente era ofrecida.

Fue tan prolífero el cultivo de la vid, que la corona española se vio amenazada, restringiendo la implementación de nuevos viñedos y decretó impuestos para que el comercio hacia Europa siguiera creciendo. Luego de la abolición de dicha medida en 1678, lo cual ayudó a la buena imagen que alcanzaron en el mundo los vinos durante casi dos siglos, se decretó una nueva restricción a mediados del siglo XIX bajo el régimen napoleónico en España. Tal medida habría sido tomada porque los precios de los vinos chilenos competían con los producidos en esa región de Europa.

Historia del Vino en el Mundo (Primera Parte)

Los Romanos plantaron viñedos por toda la Europa Mediterránea, convirtiendo de esta forma al vino en un elemento transcultural. Hay una leyenda de cómo Dionisos conquistó Asia, hasta la India, con un ejército de músicos y bailarines que danzaban y ofrecían vino.

medieval_wine_tapestryEn la Edad Media la viticultura y la enología estuvieron principalmente en manos de los monjes cristianos, que mejoraron los sistemas de elaboración. Los países que más destacaron en la elaboración de vinos fueron Francia, Italia y España; se trataba de un producto de consumo habitual, pero en general de baja calidad. Sin embargo, a medida que la burguesía fue creciendo la calidad de los vinos también fue en aumento, y en el siglo XVIII Burdeos fue la primera región que instauró un protocolo de calidad mediante la definición del sistema Grand Cru.

Un siglo más tarde la filoxera arrasó los viñedos de Europa, creando una crisis que tardó mucho en cerrarse, y cuya solución pasó por injertar la vid europea en el pie de una americana, con lo cual se ganaba en resistencia a la plaga manteniendo las propiedades originales. Hoy en día la gran mayoría de vides en Europa están injertadas.

Durante los siglos XVI, XVII y XVIII la viticultura pasó al Nuevo Mundo, comenzando en América Central y del Sur y continuando su desarrollo por América del Norte y luego Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica, donde se introdujeron distintas variedades de uvas. Estos países producen hoy en día vinos de una excelente calidad, que en algunos casos compiten tranquilamente con los mejores vinos europeos.

En España se comenzó a embotellar vino allá por el siglo XIX, siendo pionera la región de la Rioja. Desde entonces el proceso de innovación y desarrollo en la elaboración del vino ha ido en aumento, y cada vez hacemos mejor vino en todas nuestras zonas geograficas de elaboración.

Historia del Vino en el Mundo (Segunda Parte)


El vino es una de las bebidas más antiguas que se conoce. Está ya presente en el antiguo Egipto y en Sumeria, y se han encontrado restos arqueológicos que demuestran la producción de vino en amplias zonas de Georgia e Irán (Montes Zagros) entre el 6.000 y el 5.000 A.C. Hay evidencias de que en la península Ibérica había viñedos en el tercer milenio A.C.

Posiblemente el vino comenzó a elaborarse por accidente; por alguna razón las uvas fermentaron y alguien probó el caldo. Quizás la referencia más antigua sobre el vino aparece en el Antiguo Testamento: “Noé comenzó a labrar la tierra, y plantó una viña; bebió el vino y se embriagó” (Génesis 9-21). Posteriormente, en la Biblia, el vino aparece citado cientos de veces, y en el Nuevo Testamento se convierte en parte del núcleo del ritual cristiano como símbolo de la sangre de Cristo.

Hay hallazgos arqueológicos en el antiguo Egipto de vasijas de vino etiquetadas con el nombre del productor, el viñedo y el año. También sabemos que los romanos registraban cuales eran los mejores viñedos en función del terreno y el clima, todo lo cual demuestra un temprano interés por la calidad.

En el mundo pagano, sobre todo en Grecia y Roma, el vino estaba muy presente en la cultura popular y había dioses especialmente dedicados al vino por sus cualidades embriagadoras y afrodisiacas. En los cultos de Dionisos y Baco se organizaban fiestas y orgias en las que abundaban el vino, los manjares y los placeres sexuales.